Salimos de la competencia por el título en la Copa América, pero de la forma más sufrida y emocionante, con las botas puestas, con un cuchillo en los dientes y con muy buenos ganchos de derecha que se llevaron las quijadas paraguayas. Hemos quedado entre los 4 primeros equipos del torneo.

Dicen algunos «comentaristas» internacionales que el fútbol sudamericano está en decadencia. ¿Será posible?, los grandes de siempre están lejos de ser lo de antes, Argentina no gana nada importante como selección desde años, Brasil está confundida en su esquema, juegan a lo europeo, es decir, a ese juego europeo esquemático y rígido que no logra sorprender. La cantidad de goles en esta Copa fue mezquino, el valor de lo defensivo tiene una relevancia significativa. Se tiene mucho miedo a perder. Equipos como Paraguay y Perú son equipos organizados y resistentes, antes que arriesgados y voluntariosos. Señores eso no es decadencia, es fútbol contemporáneo, equipos que se edifican desde atrás hacia sus delanteros, evitar goles en contra y lograr goles a favor en las pocas oportunidades que se tengan. Aunque también es cierto que hay equipos como España que muestran otras cosas, pero son una excepción.

Venezuela tuvo el honor de ser un equipo con distintos matices, el primero lo defensivo, lo que acusamos y dudamos durante los amistosos fue subsanado, contra Brasil y Chile mostramos una faceta pocas veces vista. Luego, lo ofensivo, logramos marcar goles, incluso con más jugadores de lo que hicieron otras selecciones.

Anoche perdimos contra Paraguay, bajo un formato que muestra que la suerte tiene mucho que ver en el fútbol, los penales. Luego de 120 minutos en los que pegamos todos los palos que pudieron darnos una victoria holgada y serena de haber entrado en las redes, tocó resolver por medio de la ruleta rusa del fútbol, disparar a mansalva al portero contrario. Lo curioso, es que frente a Brasil y Chile esos mismos palos nos salvaron, pero esta vez fueron nuestros enemigos. No discutiremos sobre el árbitro o la mediocridad del fútbol paraguayo, ambas cosas se resuelven fácil, haciendo los goles que hay que hacer. Ayer la suerte no estuvo de nuestro lado.

Nuestro fútbol embriagó al mundo, algunos chilenos, algunos argentinos y algunos mexicanos no se explican como sus equipos no llegaron a estar entre los 4 primeros. En su borrechera salió su verdadero ser, uno egoísta y acomplejado, para gritar por un micrófono que la vinotinto es mediocre, si siendo mediocre estamos entre los 4 mejores, los chilenos, argentinos y mexicanos son tan malos que ni a mediocre llegan.

Sujetos como este:  http://twitter.com/#!/Faitelson_ESPN rayan en los ridículo, ya que reciben sueldos por actuar como viejas de vecindarios, mirando por encima del hombro al vecino que la va bien. Estamos claros, esta «gorda chismosa» de haber sabido de fútbol realmente habría sido jugador o entrenador, no comentarista. Y cuando ya no tiene excusa termina desvirtuando a la Copa América, seguro que la Copita que juegan en Norteamérica tiene más campeones mundiales o es más competitiva. Ja.

Aún queda un trámite más, la lucha por el 3er lugar de la Copa, es un duelo que debemos disfrutar y ganar. Mientras, el mundo sigue embriagado de VINOTINTO, los éxitos personales comienzan a ser rumores, los nombres vinotintos resuenan en el mercado de fichajes del mundo.

¡¡¡¡Salud!!!!